Europa tomaría el control de la frontera del Peñón de Gibraltar

El Peñón de Gibraltar era el drama para que Gran Bretaña y la Unión Europea restablecieran un vínculo fluido como en el Pre-Brexit en tiempos de guerra híbrida y defensa común indispensable. Unas islas Malvinas en el corazón de la UE.

Gibraltar y el Reino Unido han llegado a un acuerdo para ceder el control de su frontera a Europa. Los británicos ahora deberán mostrar sus pasaportes a los guardias españoles o de la UE al llegar al Peñón. Debe ser ratificado por Bruselas, a donde se encuentra el canciller británico David Lammy este miércoles.

El esperado acuerdo post-Brexit permitirá que Gibraltar se una al espacio Schengen para mantener abiertas sus fronteras con España.

El Reino Unido y Gibraltar han llegado a un acuerdo post-Brexit que cederá el control de la frontera del territorio a Europa.

Lammy en Bruselas

Lammy estuvo en el Peñón el martes por la noche para conversar sobre los parámetros finales del acuerdo, que permitirá a Gibraltar unirse a la zona de libre circulación Schengen del bloque.

Ciclistas pasan por la frontera con Gibraltar. Foto: EFE

Esto significa que los británicos que lleguen al Peñón deberán mostrar sus pasaportes a los guardias fronterizos españoles o de la UE, al aterrizar en el aeropuerto.

Tras alcanzar un acuerdo con Fabián Picardo, ministro principal de Gibraltar, Lammy se dirigió a Bruselas el miércoles para intentar cerrar el acuerdo con el negociador del Brexit de la UE, Maros Sefcovic, y José Manuel Albares, ministro de Asuntos Exteriores de España.

"Como siempre, nuestro objetivo es avanzar al máximo y cerrar el acuerdo lo antes posible", añadieron fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores español.

El acuerdo previsto permitirá a Gibraltar unirse a la zona Schengen para mantener abiertas sus fronteras con España.

Gibraltar, asociado a la zona Schengen

Gibraltar se convertiría en miembro asociado de la zona Schengen sin pasaporte de la UE, que abarca 29 países europeos y permitiría la libre circulación de personas entre el Peñón y España.

Esto permitiría que unos 15.000 trabajadores españoles siguieran cruzando la frontera a diario y que los gibraltareños recuperaran la libertad de movimiento de la que disfrutaban como ciudadanos europeos antes del Brexit.

Sin embargo, el acuerdo implicaría que los británicos que lleguen a territorio británico tendrán que mostrar sus pasaportes a los guardias fronterizos españoles o de la UE al llegar al aeropuerto.

Existe la preocupación de que el acuerdo pueda fracasar en las negociaciones finales entre el canciller Lammy, el comisario Sefcovic y el canciller Albares debido a la oposición conservadora tanto en el Reino Unido como en España.

Un funcionario del Reino Unido declaró: “No vamos a Bruselas a aprobar un acuerdo. Se avecinan negociaciones difíciles sobre varios puntos conflictivos".

Sin embargo, las fuentes confiaban en el acuerdo, ya que, según afirmaban, las tres partes deseaban evitar que se repitiera una reunión anterior que tuvo lugar la primavera pasada, en la que Lord Cameron, exministro de Asuntos Exteriores, fracasó sin acuerdo, a pesar de estar cerca de concretarse.

Las autoridades británicas esperaban promocionar el acuerdo en los medios de comunicación antes de su cierre. Pero retiraron sus planes para no tentar a la suerte.

Antes de la reunión en Bruselas, el jefe de gobierno Picardo escribió en línea:"Es hora de intentar ultimar los acuerdos para una relación duradera y estable entre Gibraltar y la UE/España, que sea segura, estable y beneficiosa, que proteja a nuestra gente y brinde seguridad a los trabajadores fronterizos con el fin de lograr una mayor prosperidad para todos en nuestra parte del mundo".

Cómo sortear el problema del Brexit

Desde el Brexit, la frontera ha estado gestionada por funcionarios gibraltareños. Ha permanecido abierta gracias a que ambas partes hicieron la vista gorda a las normas.

España, por lo general, permite a los residentes gibraltareños entrar en su territorio sin controles de pasaporte. Pero ha declarado que esto no puede continuar indefinidamente. A cambio, el Peñón permite a los trabajadores españoles entrar en el territorio sin sellos de pasaporte.

Se espera que este año la UE introduzca su Sistema Electrónico de Entrada y Salida, tras un retraso considerable, incluso en la frontera con Gibraltar.

Esto implicará que todas las personas que entren en España estarán sujetas a controles de pasaporte y datos biométricos, lo que podría generar largas colas en un cruce fronterizo vital para la prosperidad a ambos lados de la frontera.

El plan, desde hace tiempo, ha sido trasladar la frontera al único aeropuerto de Gibraltar, cercano al cruce fronterizo terrestre, y que guardias fronterizos europeos de Frontex, una agencia de la UE, realicen controles de pasaportes a todas las llegadas.

Problemas de soberanía

Sin embargo, las conversaciones se estancaron repetidamente debido a cuestiones de soberanía delicadas, como el deseo de Madrid de que la policía fronteriza española realice controles de seguridad en el aeropuerto y el puerto marítimo de Gibraltar.

Gibraltar ha rechazado previamente la presencia de fuerzas de seguridad españolas en su territorio, ante la preocupación por la integridad de la base de la RAF en el aeropuerto de Gibraltar.

También se ha expresado la preocupación de que los guardias fronterizos de Frontex puedan rechazar a viajeros británicos en Gibraltar, incluso si las autoridades gibraltareñas les hubieran permitido el paso.

FUENTE:CLARIN